domingo, 10 de abril de 2011

¡OH POR DIOS! QUE A GUSTO...

  Esto es el principio de uno de los capitulos de mi libro. Espero que os guste:
  Sus manos, su pelo, su preciosa mirada, su sonrisa matadora, su cara, su… todo. Volvían a ser míos después de tanto tiempo. Después de seis meses, una semana y seis días. Después de todos esos minutos, horas, días, semanas, meses insufribles e interminables. Después de todo ese tiempo que aparentemente era de otra. Después de todo ese sufrimiento, todos esos llantos, todas y cada una de las lagrimas que había derramado por no tenerle. Después de tantísimo tiempo que habíamos pasado separados, la pasión y el amor que sentíamos desde el primer momento, no había disminuido ni siquiera un poco. El volvía a ser mio, y yo suya. Después de todo volvíamos a estar juntos, como fue en un principio y debería de haber sido siempre.
   Mis labios habían extrañado los suyos durante demasiado tiempo como para que estuvieran separados, aunque solo fuera un segundo. Su pelo era el mejor entretenimiento que podían encontrar mis manos en el mundo entero, sobre todo, después de tanto tiempo. Su voz, esa voz de ángel que tenia, por fin volvería a hablarme de esa forma que tanto echaba de menos. Y esos “Te quiero” que decía desde el fondo de su corazón, por fin serian míos otra vez. Su cara, esa preciosa mirada y su sonrisa matadora, eran las mejores vistas que podrían encontrar mis ojos en todo el mundo, por mucho tiempo que pasara. Por fin podría decirle lo mucho que le quería y cuanto le había echado de menos. Por fin volveríamos a ser felices. Y lo mejor de todo, es que lo seriamos juntos.